Roses un encantador lugar de la Costa Brava

Visitar Roses nos brinda la oportunidad de conocer uno de los patrimonios históricos más interesantes de Cataluña, poblada hace más de 3.000 años esta región posee un conjunto megalítico que incluye dólmenes, menhires y otras construcciones prehistóricas.

Entre estas construcciones destaca la Cruz de Cobertella ubicada cerca de Montjoi, una construcción formada por siete inmensos bloques de piedras verticales y una losa de gneis granítico de cubierta de más de 18 toneladas, un estrecho pasaje que culmina en una cámara funeraria, los visitantes aún pueden observar la cámara y la antecámara restauradas en 1957.

Otro espacio que vale la pena descubrir es la Ciudadela de Roses una fortaleza provista de bastiones y un gran foso que en la antigüedad albergó a la ciudad, no obstante el crecimiento urbano alcanzó toda su parte exterior, rodeándola por completo; la fortificación que se conserva como patrimonio histórico fue construida en el siglo XVI para proteger la región de los ataques de piratas y de las fuerzas francesas.

Roses cuenta también con el puerto pesquero con mayor número de capturas de toda la Costa Brava, un verdadero espectáculo que pueden disfrutar quienes visitan este municipio es la llega en las mañanas y las tardes de las barcas de pesca, que dejan ver toda la cultura pesquera, un puerto realmente hermoso en que el tiempo parece haberse detenido.

El faro Construido en 1864 junto a un acantilado en una zona rocosa de gran interés geológico es otro de los atractivos de Roses, un monumento viviente que sirvió y aún sirve de guía a los navegantes que se adentran en las aguas mediterráneas que circundan esta región, en la actualidad se ha convertido en un sitio de encuentro y punto de orientación para quienes vienen a hacer excursionismo o en el camino de ronda.